Guía básica de salvamento de fauna

Los encuentros con animales silvestres heridos o huérfanos pueden ser tanto conmovedores como desafiantes. Es importante que las personas puedan comprender cómo responder adecuadamente para garantizar el bienestar de estos animales, así como para respetar las normas locales y proteger la seguridad. Esta guía proporciona información detallada sobre cómo manejar situaciones de este tipo de manera responsable y compasiva.

Evaluación de la situación

Cuando encuentres un animal silvestre herido o huérfano, es esencial evaluar la situación antes de intervenir. Lo primero es asegurarte de que el animal realmente necesita ayuda, pues ,muchos animales salen pronto del nido o madriguera, aun siendo muy pequeños, pero sus padres continúan criándoles, a esto se le denomina crianza nómada o campestre, por lo que en estas situaciones lo mejor es no intervenir y permitir que la naturaleza siga su curso. Si consideras que realmente está en peligro o que necesita ayuda (ej., está vagando junto a una carretera, hay perros callejeros u otros animales domésticos merodeando), hay algunos pasos a seguir:

Observación: realiza una observación desde una distancia segura y evalúa en lo posible aspectos como la condición física, el comportamiento y el entorno. Con esta información, determina si el animal tiene signos de trauma, enfermedad o parece realmente ser un animal huérfano (ej., ojos hundidos, moscas volando alrededor del animal, animal echado de costado y con respiración agitada).
Identificación de riesgos: en ocasiones puede haber presencia de depredadores naturales cercanos, tráfico vehicular o peligros ambientales (ej., un risco o material suelto y suelo muy inclinado). Mantente alerta y toma acciones que te permitan minimizar los riesgos en caso de actuar, tanto para ti como para el animal (ej., perseguirlo puede solo puede hacer que salte a un lugar más peligroso). Ten en cuenta que muchas especies silvestres crían en zonas de difícil acceso, precisamente para dificultar a los predadores cazarles en esta sensible etapa de sus vidas.
Seguridad personal: antes de acercarte al animal, asegúrate de tu seguridad y la de las personas que te acompañen. Mantén la calma y evita acciones que puedan asustar al animal. Esto no es lo usual, pero es especialmente importante con animales que podrían resultar venenosos o muy agresivos.
Contacta con profesionales: en muchos casos la mejor opción es contactar a personas e instituciones capacitadas para el rescate y la rehabilitación de los animales silvestres. Muchos países latinoamericanos cuentan con entidades regionales de control ambiental, las cuales tienen funcionarios competentes para esta función, ya sea directamente o a través de alianzas con instituciones zoológicas, asociaciones de profesionales de áreas biológicas, de gestión animal y conservacionistas, lo cual incluye:
- Autoridades ambientales: las autoridades ambientales tienen centros de comando y alianzas que permiten informar sobre situaciones relacionadas a brindar ayuda a animales silvestres que lo puedan requerir, así como brindan orientación de qué pasos seguir. En muchas partes de Colombia por ejemplo, llamando a la línea #123 desde cualquier móvil, te pueden contactar con la Policía Ambiental y derivar las llamadas a otras instituciones a las que puedes notificar incidentes con fauna que puedan requerir atención.
- Centros de atención y valoración: muchas entidades regionales cuentan con centros de atención y valoración (CAV) y centros de rehabilitación (CAVR) que incluye personal y vehiculos para prestar ayuda a los animales silvestres que puedan requerirlo. Las corporaciones autónomas regionales en los departamentos y los departamentos administrativos de ambiente de cada gran ciudad son las principales entidades a las que debes recurrir. Actualmente no tienen una línea única de atención, pero a través de la Policía o de las oficinas de enlace de los terminales de transporte es posible ubicar funcionarios que puedan ayudar o recibir orientación sobre los pasos a seguir.
- Profesionales que trabajan con fauna silvestre: muchos profesionales, biólogos, médicos veterinarios, ecólogos, zootecnistas, trabajan en instituciones zoológicas y de conservación que podrían brindarte orientación e incluso ayuda específica. Puedes encontrar un listado de profesionales miembros que cuentan con conocimientos en estos temas ingresando a Asociados – Web VVS (veterinariosvs.org)

Primeros auxilios básicos

Este artículo no pretende convertirse en una guía completa y exhaustiva sobre los procedimientos de primeros auxilios para la fauna silvestre que se encuentre en necesidad, pero si en un parámatro de orientación para las personas mientras que esperan la llegada de profesionales o la asistencia adecuada, esto claro, siempre y cuando te sientas seguro haciéndolo y no pongas en peligro al animal ni a ti mismo. Algunas medidas incluyen:

Mantener la calma y tranquilizar al animal: habla suavemente y muévete con cuidado para no asustar al animal. Evita movimientos bruscos que puedan aumentar su estrés.
Manejo seguro cuando es estrictamente necesario: si es necesario mover al animal, hazlo con precaución y utilizando guantes de cuero o elementos adecuados para evitar lesiones tanto para ti como para el animal, puede ser usualmente mantas gruesas y toallas con las que puedas envolver al animal que requiere ayuda. Claramente esto no es práctico en el caso de animales grandes o muy agresivos, en cuyo caso, esperar la atención de un profesional sin perder de vista al animal herido, es tu mejor opción.
Control de hemorragias y fracturas: en ocasiones puede evidenciarse que hay sangre y fracturas. Si tienes unos guantes, puedes intentar aplicar presión directa sobre la herida con gasas limpias o vendas de algún botiquín de un vehículo o casa cercana. En el caso de fracturas, lo importante es inmovilizar la zona de la fractura, lo cual no es facil en muchos animales, especialmente si se tornan agresivos, pero cuando se puede, lo que se hace es impedir que el animal aletee o realice movimientos bruscos, ya sea introduciendolo en una caja, kennel o contenedor, o cuando se tiene más experiencia en la manipulación, aplicando un vendaje de inmovilización en la extremidad afectada.
Mantenimiento de la temperatura corporal: especialmente con las crías, pero también con animales debilitados, es importante reducir la exposición a condiciones ambientales extremas (ej., sol o lluvia directa), lo que puede causar calor o frío excesivo. Para ello puede ponerse una manta, una sombrilla o incluso una caja que mantenga al animal confortable mientras llega la ayuda.
Hidratación y alimentación: a algunos animales que tienen algo de movilidad, se les puede ofrecer agua fresca o una pequeña cantidad de alimentos adecuados para el tipo de animal, por lo que en este último caso, se debe conocer o buscar un poco sobre la historia natural del animal que se tiene en frente. Evita forzar la alimentación si el animal está demasiado débil o desorientado, pues esto puede hacer que se agudicen o empeoren los signos.

Qué más hacer para ayudar

Es importante documentar mediante fotos y vídeos la situación y proporcionarla de manera detallada a las autoridades o profesionales que brindarán asistencia al animal. Toma notas sobre la ubicación, la condición del animal y cualquier acción que hayas tomado que permita a las personas que se encargan de su rehabilitación de poder emplear estos datos para eventualmente devolver ese animal a la vida libre.

El tráfico de fauna y el abandono de animales silvestres mantenidos como mascotas en latinoamérica sigue siendo una de los principales problemas que enfrenta la fauna, por lo que además de responder a situaciones de rescate, es fundamental que te involucres con tu comunidad sobre la importancia de la conservación de la vida silvestre, especialmente evitar la compra de animales silvestres. Por otro lado, es cada vez es más frecuente el concepto de “casa rural” o “casa campestre”, esto hace que el contacto con animales silvestres y los conflictos entre humanos y animales sean también más frecuentes. Algunas medidas incluyen:

Concienciación sobre los hábitats naturales: se debe promover la protección de los entonos naturales en los que ancestralmente han vivido los animales silvestres, reduciendo la fragmentación de los bosques causados por grandes vías de tránsito vehicular, mediante estrategias como “pasos para la fauna” implementados en varias regiones de Colombia.
Educación sobre coexistencia: las inmobiliarias y entidades territoriales tienen como obligación brindar información sobre coexistencia segura y respetuosa con la vida silvestre de las unidades habitacionales que licencian en sus regiones, incluida la gestión adecuada de residuos para evitar la aparición de especies silvestres merodeando los basureros, al tiempo que impedir la caza furtiva de personas que eventualmente se tornen intolerantes a la presencia de animales atravesando los jardines de sus viviendas.
Programas para la atención de fauna: demandar y apoyar los centros de atención y valoración de fauna en las regiones, pues las entidades regionales por ley deben tenerlas, sino que mediante investigación científica y policiva se comprenden mejor las necesidades de atención y las dinámicas del comportamiento del tráfico de fauna y el tránsito de fauna en los territorios.

Conclusiones

El rescate y la atención de animales silvestres heridos o huérfanos requieren conocimientos básicos y el apoyo de profesionales capacitados, así como coordinación con las entidades de control ambiental territorial. Al seguir los pasos adecuados, con una actitud humanitaria rápida, compasiva y cooperativa, las posibilidades de supervivencia y el bienestar de estos animales puede mejorarse, al tiempo que contribuimos a la protección de la vida silvestre en su conjunto.