Proteínas de fase aguda en medicina de animales silvestres

La inflamación es un mecanismo de respuesta por parte del sistema inmunológico como proceso para combatir infecciones o acciones que afecten la integridad de los tejidos anatómicos (trauma, neoplasia, endo o exotoxinas, entre otros). El sistema inmune realiza trabajo en conjunto con las células inmunitarias produciendo citoquinas (IL-1, IL-6, IL-8, TNF- α) y mediadores de la inflamación que en procesos iniciales desarrolla una reacción de fase aguda caracterizada por la activación de procesos metabólicos en diferentes órganos. Como ejemplo de interés para esta nota, la citoquina IL-6 en el hígado estimula la producción de proteínas de fase aguda (PFA) Figura 1 [1,2].

Figura 1. Funciones de la IL-6, tomado y adaptado de: Naseem S., Iqbal R., Y Munir T. Role of interleukin-6 in immunity A Review. IJLSR. 2016 Apr-Jun; 4(2):268-274.

Los PFA son biomarcadores clasificados hoy en día según las variaciones de su concentración en sangre durante el proceso de respuesta inflamatoria, clasificándolas en positivas y negativas. Las positivas son aquellas proteínas que aumentan su concentración en sangre al iniciar el proceso inflamatorio, como ejemplo se tiene la: Proteína C reactiva (CRP), Amiloide A sérico (SAA), Haptoglobina, Fibrinógeno, Ceruloplasmina, Macroglobulina a 2, Glicoproteína ácida a1, Complemento (C3C4), y las proteínas de fase aguda negativas son las que disminuyen del flujo sanguíneo como respuesta a la inflamación, como la Albúmina, Transferrina, Transtiretina yla Proteína de unión al retinol [1].

Los biomarcadores de la inflamación PAF positiva cada día han venido desarrollando un papel importante en la medicina veterinaria, esto debido a que brindan una mayor sensibilidad y especificidad que los leucogramas, sin restar importancia de esta última prueba diagnóstica. Lo que hace que su sensibilidad sea mayor, es el tiempo transcurrido para observar una alteración en sangre de estos biomarcadores siendo inicial la variación en las proteínas de fase aguda (horas) y luego las variaciones en los leucogramas (días). Gracias a esto, las proteínas de fase agua brindan un mayor entendimiento de la enfermedad, de los procesos fisiológicos presentes en el animal y a su vez contribuyen en el monitoreo de un tratamiento, dan un valor pronostico a la patología cursante en el individuo, evalúan el nivel de estrés y el progreso de enfermedades inflamatorias crónicas, razones por la cuales actualmente en la práctica interna de medicina veterinaria las PFA han empezado a tener un crecimiento exponencial en su uso rutinario [3].

Existen varias técnicas analíticas para las PFA como lo son la electroforesis proteica, ELISA y analizadores en química seca; técnicas donde los volúmenes empleados de suero o plasma son en promedio 0,4mL, siendo viable la realización de la misma en múltiples especies. En cuanto a la fauna silvestre es igualmente aplicable el uso de biomarcadores de PFA, Bertelsen, et. al en el 2009 publicaron el primer artículo que demostró la aplicación de las proteínas de fase aguda en mamíferos no domésticos [4]. Desde entonces se ha confirmado la presencia de estas proteínas en múltiples especies, pero con variaciones en la proteína principal diagnóstica según la especie, principalmente variando entre la CRP o la SAA, pero con algunas excepciones [3]. Actualmente hay múltiples investigaciones que se están llevado a cabo e incluso hay instituciones de referencia en este tema como la Universidad de Miami, quienes presentan varias publicaciones en especies silvestres como psitácidos, cebras, elefantes, manatís, mascotas exóticas, entre otros. Por todo esto, y aunque reconocemos que en nuestro contexto aún hay factores como costo y disponibilidad de equipos que limita estos análisis, queremos dejar la iniciativa de buscar cada vez mejorar nuestros procesos médicos en la atención de nuestra fauna con herramientas que ayudaran a definir un pronóstico para el paciente y seguimiento al tratamiento como el generar estudios en nuestras especies con la disposición de generar trabajos colectivos de investigación con laboratorios como Acute Phase Protein Laboratory de la Universidad previamente mencionada [5].

Referencias

  1. Fariñas F. Inflamación, proteínas de fase aguda y proteína c reactiva: bases y utilidad clínica en pequeños animales. Bionews. 2019; 24:1-6.
  2. Naseem S., Iqbal R., Y Munir T. Role of interleukin-6 in immunity A Review. IJLSR. 2016 Apr-Jun; 4(2):268-274.
  3. Cray C., Zaias, J., Altman, N. Acute phase response in animals: a review. Comp Med, 59(6): 514-526, 2009.
  4. Bertelsen M., Kjelgaard-Hansen M., Grondahl, C., Heegaard, P. y Jacobsen, S. Identification of acute phase proteins and assays Applicable in nondomesticated mammals. JZWM. 2009: 40(1):199-203. 5. Acute Phase Protein Laboratory [Internet]. University of Miami Health System University of Miami Health System. 2021 [consultado, 18 enero 2021]. Disponible en: http://cpl.med.miami.edu/acute-phase-protein/publications
  5. Acute Phase Protein Laboratory [Internet]. University of Miami Health System University of Miami Health System. 2021 [consultado, 18 enero 2021]. Disponible en: http://cpl.med.miami.edu/acute-phase-protein/publications