Tremarctos ornatus

OBRA DERIVADA: Fenner K. 2012. “Tremarctos ornatus” (En línea), Animal Diversity Web. Consultado el 13 oct, 2021 at https://animaldiversity.org/accounts/Tremarctos_ornatus

Descripción física

Son animales endotérmicos, homeotérmicos de tamaño mediano y de color negro uniforme, aunque se han observado individuos de color marrón rojizo. El nombre común “osos de anteojos” proviene de las marcas blancas en la cara que crean anillos alrededor de los ojos; estas marcas más claras a menudo se extienden por el pecho, formando un parche de pelaje ligero en forma de babero. Las marcas más ligeras son muy variables, únicas para cada individuo, y pueden estar ausentes por completo. El pelaje es de longitud media a larga. Los osos de anteojos tienen una cola corta, de unos 70 mm de largo, que a menudo está completamente oculta por el pelaje. Tienen una complexión robusta, orejas pequeñas y redondas, un cuello corto y grueso y un hocico robusto. Como todos los osos, los osos de anteojos están equipados con una postura plantígrada y las extremidades delanteras son más largas que sus extremidades posteriores. Esta característica de las extremidades le da a la mayoría de los osos increíbles habilidades de escalada. En relación con su tamaño corporal, los osos de anteojos tienen el músculo cigomaticomandibular más grande que cualquier otra especie de oso, lo que junto a los lóbulos romos de los dientes de las mejillas son adaptaciones para su dieta principalmente herbívora. En cuanto al peso pueden estar entre los 60 y los 200kg, con una longitud de entre los 1,3 y 2m, siendo los machos más grandes y pesados que las hembras (Kattan, et al., 2004; Nowak, 1999; Servheen, et al., 1999).

Distribución geográfica

El oso de anteojos (Tremarctos ornatus) es la única especie nativa suramericana. Se encuentra en las regiones montañosas de Ecuador, Colombia, Venezuela, Perú, Bolivia y Panamá. También habita la parte noroccidental de Argentina (Hunter, 2011; Nowak, 1999).

Hábitat

El oso de anteojos ocupa una variedad de hábitats terrestres del neotrópico en su rango de distribución, siendo principalmente encontrado en bosques densos con abundantes recursos alimenticios y refugios. También puede encontrarse en zonas paramunas, matorrales y pastizales, los cuales pueden recorrer en diferentes temporadas, aunque sin conocer el motivo exacto en el que ocurre. Puede encontrarse desde los 475 hasta los 3650msnm, pero principalmente entre los 1900 y 2350msnm (Kattan, et al., 2004; Servheen, et al., 1999).

Reproducción

Gran parte del comportamiento reproductivo de esta especie está por investigar; sin embargo, se sabe que son animales poligínicos; machos y hembras se unen para aparearse entre los meses de abril y junio. La pareja permanece junta durante 1 a 2 semanas, copulando varias veces durante este período (“International Association for Bear Research and Management”, 1999; Hunter, 2011; Nowak, 1999; Servheen, et al., 1999).

Las parejas de osos de anteojos se han visto juntas entre marzo y octubre, durante la época del año en que la fruta comienza a madurar. Esto indica que, al igual que los osos bajo cuidado humano, los osos de anteojos probablemente están adaptados a la cría en varias épocas del año. Los osos de anteojos son monestros y probablemente son capaces de retrasar la implantación, lo cual explicaría la variación en los tiempos de gestación reportados en cautiverio, que van entre los 160 y 255 días (5 – 8,5 meses). También se reportan nacimientos “fuera de temporada” observados en osos salvajes, lo cual hace suponer que esta condición sobre la implantación tardía puede darse en la especie. La placentación es de tipo gonocoriónica, gonocorística decidua, pudiendo mantener la gestación de sexos separados. Los cachorros generalmente nacen varios meses antes de que comience la temporada de fructificación, lo que les permite a los cachorros tiempo suficiente para ser destetados antes de que la fruta madure para que puedan comer. En la naturaleza, una hembra puede criar de 1 a 4 cachorros (2 en promedio). Los cachorros son altriciales, nacen con los ojos cerrados (los abren a los 30 días) y pesan unos 300 g cada uno, siendo mantenidos solo por la madre. El tamaño de la camada se correlaciona positivamente con el peso de la hembra y la abundancia y variedad de fuentes de alimento. Tanto los osos machos como las hembras son destetos al año de edad y alcanzan la madurez sexual entre los 4 y los 7 años de edad, siendo más temprana en las hembras (“International Association for Bear Research and Management”, 1999; Hunter, 2011; Nowak, 1999; Servheen, et al., 1999).

Esperanza de vida y longevidad

La vida útil más larga registrada de un oso de anteojos fue en el Zoológico Nacional en Washington D.C., donde el oso vivió hasta los 36 años y 8 meses de edad. No se sabe mucho sobre la vida media de un oso de anteojos en vida libre, pero se cree que es de alrededor de 20 años (Nowak, 1999; Paisley, 2008).

Comportamiento

Los osos de anteojos tienden a ser animales solitarios (excepto cuando una hembra está con cachorros), pero se han reportado uniones temporales en áreas donde la comida es abundante. Hay cierto desacuerdo sobre su patrón de actividad. Algunos argumentan que son estrictamente diurnos y crepusculares, mientras que otros han declarado que también son nocturnos. No hay evidencia que sugiera que esta especie pase alguna parte del año hibernando. Estos osos son excelentes escaladores y pasan una buena cantidad de tiempo en los árboles. Una de las características más singulares de los osos de anteojos es su uso de plataformas o “nidos” que los osos crean en el sotobosque de los árboles en los que buscan fruta. Estas plataformas también se utilizan para dormir (Castellanos, 2011; Nowak, 1999; Servheen, et al., 1999).

Es poco probable que estos osos sean altamente territoriales, ya que se han observado alimentándose en pequeños grupos donde la comida es abundante. Algunas fuentes informan diferencias estacionales y basadas en el sexo en los rangos de hogar, estando entre los 7 a los 27km2 (promedio 10 para hembras), siendo más grandes en época seca y en cuanto a género sexual mayor en machos (Hunter, 2011).

Hábitos alimenticios

Además de los pandas gigantes, los osos de anteojos son probablemente la especie de oso más herbívoro (folívoro y frugívoro). Parecen tener una fuerte preferencia por las bromelias y las frutas, pero también se han observado comiendo musgo, cactus, orquídeas, bambú, miel, madera de árbol, palmeras, invertebrados, pequeños mamíferos, aves e insectos. Se sabe que los osos de anteojos atacan los cultivos de los agricultores, especialmente el maíz, lo que a menudo resulta en que los granjeros les disparen. Rara vez se han observado matando ganado pero aprovechan fácilmente los restos de un cadáver. Una de sus técnicas de alimentación más singulares es la construcción y el uso de plataformas de alimentación para obtener un acceso más fácil a los alimentos en lo alto del dosel (Hunter, 2011; Nowak, 1999; Servheen, et al., 1999).

Comunicación y percepción

El marcaje y la olfación es la forma dominante de comunicación, pero se sabe que tienen al menos 5 sonidos diferenciados para la comunicación entre la madre y las crías (Nowak, 1999; Servheen, et al., 1999).

Papel en el ecosistema

El papel que juegan los osos de anteojos en el ecosistema permanece en gran parte sin estudiar. Sin embargo, debido a su dieta en gran parte herbívora, es probable que desempeñen un papel en la dispersión de semillas. Poseen un gran valor religioso y cultural para los pueblos nativos que comparten su rango de distribución. Los osos de anteojos a veces son cazados ilegalmente con fines medicinales o rituales. En algunas partes su carne es muy apreciada. La vesícula biliar a menudo se vende al mercado del este de Asia, donde se utiliza con fines medicinales tradicionales, aunque no hay un beneficio comprobado de estos materiales para los humanos y el efecto de esta caza ilegal en las poblaciones puede ser devastador (Paisley, 2008; Ruiz-Garcia, et al., 2006; Servheen, et al., 1999).

Los osos de anteojos pueden reunirse en pequeños grupos para alimentarse en los campos de maíz. Rara vez pueden robar ganado de las granjas locales que están invadiendo su hábitat (Nowak, 1999; Servheen, et al., 1999).

Estado de conservación

Al igual que con muchas especies, la pérdida de hábitat juega un papel importante en la disminución de la población de osos de anteojos. Solo en Ecuador se ha estimado que ha habido una pérdida del 40% del hábitat adecuado en el área de distribución natural de los osos. Esto crea pequeñas poblaciones aisladas de osos en las islas. Dado que los osos de anteojos dependen de diferentes hábitats para producir su suministro de alimentos durante las diferentes estaciones, es esencial preservar grandes áreas para garantizar que los osos tengan un suministro suficiente de alimentos durante todo el año (Peralvo, et al., 2005).

Predadores

Los osos de anteojos son uno de los mamíferos más grandes de América del Sur y no se reportan depredadores para los osos adultos. Los cachorros de oso de anteojos pueden ser depredados por pumas, jaguares y ocasionalmente, por otros osos de anteojos machos adultos (Nowak, 1999).

Referencias

  • “ARKive” (On-line). Accessed March 14, 2012 at http://www.arkive.org/spectacled-bear/tremarctos-ornatus/#text=Biology.
  • “International Association for Bear Research and Management” (On-line). Bear Species Descriptions. Accessed April 16, 2012 at http://www.bearbiology.com/index.php?id=42.
  • Castellanos, A. 2011. Andean bear home ranges in the Intag region, Ecuador. Ursus, 22: 65-73.
  • Hunter, L. 2011. Carnivores of the World. New Jersey, USA: Princeton University Press.
  • Kattan, G., H. Hernández, I. Goldstein, V. Rojas, O. Murillo, C. Gómez, . Restrepo, F. Cuesta. 2004.
  • Range fragmentation in the spectacled bear Tremarctos ornatus in the northern Andes. Oryx, 38: 155-163. Accessed March 15, 2012 at http://journals.cambridge.org.proxy1.cl.msu.edu/action/displayAbstract?fromPage=online&aid=220197.
  • Nowak, R. 1999. Walker’s Mammals of the World. Baltimore, MD: Johns Hopkins University Press.
  • Paisley, S. 2008. “IUCN” (On-line). Accessed March 14, 2012 at http://www.iucnredlist.org/apps/redlist/details/22066/0.
  • Parker, E. 2012. “Spectacled Bear – Ecology and Habitat” (On-line). Accessed March 15, 2012 at http://wwf.panda.org/about_our_earth/species/profiles/mammals/spectacled_bear/specbear_ecology_habitat/.
  • Peralvo, M., F. Cuesta, F. van Manen. 2005. Delineating Priority Habitat Areas for the Conservation of Andean Bears in Northern Ecuador. Ursidae, 16: 222-233.
  • Ruiz-Garcia, B., H. Gómez, R. Wallace. 2006. Habitat preferences of the Andean bear (Tremarctos ornatus) in the Bolivian Andes. Journal of Zoology, 268: 271-278.
  • Servheen, C., S. Herrero, B. Peyton. 1999. Bears. Status Survey and Conservation Action Plan. Gland, Switzerland and Cambridge, UK: IUCN.